El futuro industrial pasa por una adecuada gestión energética


Máster en Gestor EnergéticoEl aprovechamiento racional de las fuentes energéticas y el uso eficiente que se haga de ellas son temas fundamentales que suscitan intensos e interesantes debates a la hora de buscar fórmulas para el mantenimiento del estado de bienestar, tal y como lo entendemos hoy en día. Administraciones públicas, organismos internacionales y entidades plurinacionales se afanan en desarrollar normas, leyes, decretos e innovaciones tecnológicas enfocadas a mantener la sostenibilidad del medioambiente y continuar con las ratios de acceso a las mismas.

Uno de los sectores que demandan un aumento sustancial de la eficiencia en el consumo de energía es LA INDUSTRIA. Los últimos datos aportados por la Oficina Europea de Estadística (Eurostat) muestran una situación preocupante en el binomio energía – industria en España, habida cuenta de que el peso que la industria en el consumo global de energía en el país supera el 25%, su intensidad energética es superior a la media europea y el 57% de esa energía demandada es cubierta por gas y petróleo. Estos datos resultan más preocupantes si los analizamos con el peso relativo de la industria en el PIB nacional, inferior al del resto de países europeos.

Es aquí donde la figura del Gestor Energético cobra una gran relevancia, convirtiéndose en uno de los actores principales en la transición de la industria actual a la denominada Industria 4.0, caracterizada por la introducción en sus modelos productivos de nuevas tecnologías asociadas al campo del ahorro y la eficiencia energética, donde se priorizará la reducción de energía necesaria para la producción de un bien o servicio. Se debe tener en cuenta que, en España, esta evolución es mucho más necesaria al existir un modelo caracterizado por un alto consumo.

De esta forma, aunque la industrial tradicional tiene un gran margen de mejora debido al uso intensivo que hace de los recursos es, a su vez, la que puede mostrar mayores dificultades a la hora de implantación de estas tecnologías y políticas, debido a los costes de inversión que supone y por tener procesos menos adaptados a esta nueva metodología. Será responsabilidad del gestor energético apostar al máximo para evolucionar de un modelo de industrial con tasas de hiperconectividad en todos sus procesos productivos, lo que permita una rápida adaptación a los cambios que exige el mercado.

El futuro que se le presenta al Gestor Energético es, cuanto menos, interesante, si tenemos en cuenta la transversalidad de sus competencias con respecto al resto de sectores productivos, ya sean los relacionados con el sector energético (agua, la electricidad o el gas) o con los de la propia construcción, siendo este último el de mayor proyección. La eficiencia energética referida a edificios de oficina, residenciales y de uso público representa el 30% del total de las posibilidades de mercado para profesionales de este sector, seguidos por alumbrado público con un 20%, el sector industrial (15%), sector sanitario (13%), centros comerciales (6%), hostelería y restauración (4%).

Esta apuesta decidida y necesaria por la eficiencia energética ha generado un déficit de profesionales que, según la Asociación Profesional Andaluza de Gestores Energéticos (APADGE) se estima, sólo para Andalucía, en unos 100.000 puestos de trabajo en los próximos 15 años. Hay que tener en cuenta que el gestor energético es una nueva figura profesional que forma parte de los llamados EMPLEOS VERDES, una serie de cualificaciones profesionales nacida de las directivas europeas bajo la premisa de situar como motores de la competitividad y de la innovación dentro de la economía de la Unión Europea a sectores tan importantes como las energías renovables, el ahorro y la eficiencia energética.

Con el fin de dar respuesta a esta futura demanda profesional y que, a día de hoy, ya es una realidad, el Centro de Formación Permanente de la Universidad de Sevilla ha convocado la I Edición del Master Propio de Gestor Energético, con el que se pretende abordar, de manera integral, la importancia de la gestión energética en los diferentes sectores y organizaciones en un momento que apuesta por la sostenibilidad y el uso racional de sus recursos. El Máster Propio de Gestor Energético aportará al alumno, no solo los conocimientos técnicos y profesionales para desempeñar su labor de manera satisfactoria, sino que se adentrará en otros contenidos de gran interés como factores de inversión en el sector energéticos o el marco legal y administrativo, entre otros. Es una buena oportunidad para entrar en un mercado en pleno crecimiento.

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